Lic. Abigail Peña, MA
Celos fraternos: ¿Cómo manejar el nacimiento de un hermano?
Los celos fraternos surgen cuando un hermano se siente desplazado o siente que pierde un lugar de privilegio o que su posición y pertenencia al sistema familiar está siendo amenazada. Los celos fraternos pueden ocurrir en cualquier momento de la primera infancia, infancia media, adolescencia y adultez. A veces suele iniciar con el nacimiento del nuevo hermano o cuando el hijo siente que hay un desvalance en la dinámica familiar.
Si bien los celos es una reacción natural que implica temor a la pérdida de sentirse amado, el manejo que los padres tengan de los celos fraternos será determinante en la estabilidad, bienestar y armonía de todos los miembros del sistema.

Los celos se puedes expresar verbalmente, cuando el hijo le comunica al padre que siente que están siendo injustos o que siempre se es más benevolente con un hermano que con otro, pero en algunas ocasiones se expresan de forma indirecta o implícita con conductas inadecuadas o disruptivas, tales como realizar comportamientos que capten la atención de los padres, ser muy rebeldes o muy amables, retar o agredir, pesadillas o alteraciones en el sueño, baja autoestima, agresividad, dificultades académicas o en su alimentación. También otra manifestación de celos puede ser una regresión en alguna habilidad lograda “el niño quiere volver hacer bebé para recibir la atención o afecto que antes recibía”.
Si identificas alguna de estas conductas es importante acudir a un profesional de la salud mental, que pueda guiarte en identificar el motivo de estás conductas y las estrategias específicas de intervención.
Ante la llegada de un nuevo miembro, se recomienda:
1.Anticipar la llegada, hablando de qué pasará cuando nazca el nuevo bebé, cuáles serán los retos y cuáles serán los momentos divertidos. Ser realistas ante la llegada del nuevo integrante, hacer juntos un horario donde se incluya un momento para el hermano mayor, los momentos del cuidado del menor y el tiempo en familia. Hablar de que suele ocurrir en la clínica y que ocurre cuando las personas van a visitar al nuevo bebé y qué se espera durante el primer año.
2.Incluirlo en las compras del nuevo bebé, en la decoración de su habitación.
3. Al llegar a casa, con el nuevo bebé la madre le puede dar un regalo al hermano mayor, como muestra de cuánto lo extrañó y en ese regalo puede incluir un juego que le ayude a vincular con su hermano menor.
4. Cuando las visitas lleguen y hablen del nuevo de bebé, incluir al hermano mayor en las conversaciones, tirarle fotos también con su hermano menor e incluirlo en todas las actividades, hacerlo participe de la llegada y dejarlo que el hable sobre cómo ocurrió todo.
5.Buscar fotos de cuando él nació y mostrarle con fotos, videos e historias todo lo que hicieron en su nacimiento.
6.El vínculo que ambos padres tenga con el hermano mayor es esencial, si el niño se siente querido y amado y respetado por su padres, será capaz de compartir ese amor, ya que se ha formado un apego seguro, se le ha brindado la seguridad necesaria para que ese hijo sienta que aunque papá y mamá no estén disponibles a veces, ellos volverán y lo seguirán amando.
7. El trabajo en equipo de la familia es esencial, juntos trabajar para tener tiempo para cada miembro de la familia. Definir roles y responsabilidades. Hablar en reuniones familiares sobre lo que cada miembro siente, llegar a acuerdos.
8.Evitar delegar en el hermano mayor responsabilidades parentales: tú debes, tú tienes. El hermano mayor sigue siendo un niño y al igual que el menor necesita seguridad y protección. Evitar parentalizar al hermano mayor o hacerle sentir que como hermano mayor su responsabilidad es cuidar o velar por la seguridad de su hermano, esto le corresponde a los padres.
9. Evitar hacer críticas y comparaciones. Hablar de las cualidades y fortalezas de cada miembro y apreciar las diferencias.
10. Ante los conflictos entre hermanos, darles siempre la oportunidad de que lo resuelvan entre ellos, velar porque no haya agresión física, evitar suponer, juzgar u opinar en los conflictos, enseñarles a resolverlos entre ellos, haciendo buenas preguntas: ¿Qué pasó? ¿Qué piensas tú de lo que él dice? ¿Cómo te sentiste? ¿Cómo crees que se sintió? ¿Qué te hubiese gustado que el hiciera? ¿Cómo pueden resolver este problema? ¿Cómo le dirías esto que sientes sin herirle?, "estoy aquí para hacer preguntas y darles ideas, pero al final ustedes son los que decidirán cómo resolverlo".
11. A veces se asume que los celos solo vendrán del hermano mayor, pero también se puede presentar en el menor. La clave en ambos casos, está en darle atención : mirada, palabra, contacto, cuando ellos no la están solicitando, cuando están tranquilos y haciendo conductas positivas. Cuando se identifique que están haciendo conductas para captar la atención de los padres, ayudarles a poner en palabra lo que les pasa y a resolver el conflicto con la palabra “Me doy cuenta que cada vez que cargo a tu hermano, comienzas a subir el volumen de la televisión, sientes que paso más tiempo con tu hermano que contigo o te sientes inseguro del amor que te tengo” “Tu eres importante para mi, tu opinión y cómo te sientes, yo soy feliz cuando te sientes amado y querido por mi, cómo puedes expresar esto que sientes sin tener que subir el volumen de la televisión tan alto” “qué acuerdo podemos hacer para que también sientas que tengo un tiempo para ti”.
12.Dedicarle tiempo de calidad a cada miembro, explicarle al miembro que solicita atención cuándo llegará su tiempo.
13.Realizar actividades familiares donde se modele el compartir el amor, el hablar y escuchar a cada integrarte y validar los sentimientos de cada miembro.
Brindar seguridad, equidad, amor y contención en un ambiente de escucha y charla activa es el mejor regalo que puede darles a cada uno de tus hijos.